Consejos útiles para el uso de calzado

La elección de un zapato o una zapatilla parece ser una tarea sencilla. Sin embargo, es necesario tener en cuenta una serie de recomendaciones que sirven para evitar caídas y por ende lesiones tales como fracturas, fisuras e infecciones de la piel producto del roce del calzado.
A continuación se detalla una serie de consejos prácticos para elegir el mejor calzado posible:

• Un zapato ideal tiene que aportar soluciones a la salud de la tercera edad. Las características esenciales son la comodidad, que se juste al pie y que permita la movilidad para evitar caídas y heridas.

Muchas veces la elección de un zapato puede estar ligado al contexto de una persona. No es lo mismo un calzado para salir a la calle que otro para salir a caminar o realizar actividad física.

• Un calzado ideal para adultos mayores es aquel que tiene un grado alto de amortiguación. Esta característica sirve para compensar la posible debilidad en músculos, articulaciones y amortiguación natural. La función principal es la de evitar caídas.

• Los zapatos se deben adaptar a las condiciones físicas de la persona. Si alguien tiene problemas circulatorios, retención de líquido, presión alta, el calzado debe ser holgado, ligero y flexible. Si el adulto mayor tiene problemas óseos en sus pies, como por ejemplo los famosos juanetes, lo ideal es tener un calzado que se adapte mejor para evitar dolores y heridas. 

• La talla del calzado es un dato a tener en cuenta. No es recomendable zapatos ajustados que pueden producir lesiones en la piel y tampoco calzados exageradamente holgados que tienden a provocar caídas.

Es importante mencionar que la elección de un calzado ortopédico o especial siempre es de suma utilidad. Este tipo de zapato como todos los consejos enumerados no tienen otra función que mejorar la calidad de vida de los adultos mayores.